Muchas veces me habéis preguntado cómo fui capaz de venir a vivir a Ibiza, cómo me las arreglé para encontrar trabajo, vivienda, el colegio de mis peques. Supongo que mudarse es algo que muchas hemos querido hacer en algún momento (o en varios) de nuestra vida y sin embargo es un cambio que no demasiadas personas se atreven a hacer. Mi padre me sigue diciendo 9 meses después que tuve un par de ovarios, que trasladarse como lo hicimos, con tres peques no es para todo el mundo y yo le contesto que casi siempre las cosas son más difíciles cuando las pensamos que cuando las hacemos. Al menos en mi caso es así, yo lo pasé francamente mal mientras decidíamos si íbamos a dar este paso o no, se me hacía un mundo pensar que me iba a echar la familia a la espalda. Tenía montones de dudas, ¿y si no me gustaba mi nuevo trabajo? ¿y si no me adaptaba a trabajar por cuenta ajena? ¿y si mis hijos no se adaptaban al colegio y al instituto? ¿y si el catalán era un obstáculo para ellos? ¿Y si mi marido no era capaz a lanzar su empresa aquí o a encontrar trabajo? 

Pero todo se fue relajando cuando decidí preocuparme de cada problema de uno en uno y no adelantar acontecimientos. Lo primero era tener trabajo,  para eso busqué un portal de trabajo donde poder subir mi currículum y poner alertas en puestos de trabajos relacionados con mi perfil. Cuando salió una oferta de empleo que parecía redactada para mi, les envié mi curriculum destacando mi interés en cambiar de residencia. Me llamaron para hacer una entrevista y la suerte hizo que fuera julio y que estuviera de vacaciones en Ibiza (pero sino hubiera sido así hubiera venido igualmente) Hice una primera entrevista y me llamaron para una segunda con el que hoy es mi compañero en la oficina. Tras esa entrevista aún me tocó reunirme con los socios de la empresa una tercera vez y ya en esa reunión me confirmaron que estaban interesados en mi perfil y me tocó pactar las condiciones de mi incorporación. Si te acuerdas, el año pasado en la foto de instagram en la que me iba de Ibiza decía «hasta pronto Ibiza este año la despedida es mas dulce» y la razón de ese mensaje, era porque ya tenía billete de vuelta. La parte laboral fue así, si tu  estás interesada en mudarte y eres peluquera el primer paso es tan sencillo como buscar ofertas que digan  se necesita peluquero en la ciudad en la que quieras vivir y enviar el curriculum. 

Con el trabajo bajo el brazo, llegó otra parte complicada: buscar vivienda. Eso ha sido lo más desesperante de todo, la verdad. El mercado inmobiliario en Ibiza es la usura en estado puro, tengo anécdotas de las que un día espero reírme,  con decirte que hace un par de semanas vi un anuncio en el que se vendía una vivienda con ocupas, te lo digo todo. En este punto nos tocó analizar hasta donde podíamos llegar y a mi personalmente me tocó relajar mis expectativas estéticas. Nuestros amigos te podrán contar que pasamos un verano angustioso buscando vivienda por internet y nos toco hacer dos viajes relámpago a Ibiza para visitar pisos, una mi marido (totalmente infructuosa) y otra a mi en la que volví con las llaves de la que este año es nuestra casa. Iba a ser una casa para unos meses porque habíamos escuchado que a partir de octubre, noviembre, el alquiler bajaba de precio y se podían encontrar viviendas más adecuadas, sin embargo no ha sido así.

La verdad es que venía mentalizada de olvidarme del tema DECO durante el primer año y puedo decir orgullosa que lo estoy consiguiendo, a pesar de todo aún tengo la esperanza de encontrar mi casita bonita o al menos una vivienda con una relación calidad precio más normal, pero bueno según el pacto que he hecho conmigo misma de eso ¡ya me preocuparé a partir de Septiembre! Como el artículo me está quedando algo largo si os gusta, tiene comentarios, se comparte etc. otro día te hablo sobre como encontramos el colegio de mis peques y como les va. Si tienes cualquier duda o consulta puedes enviarme un email o dejar un comentario, como siempre si puedo ayudar a alguien comparto mi experiencia encantada ¡Feliz Viernes!

Artículos Relacionados

9 comentarios

Responder

Hola Patricia! Estoy totalmente de acuerdo con tu padre. Me parece muy interesante el tema porque creo que somos muchos los que nos gustaría probar a vivir en otro lugar pero no nos atrevemos a salir de nuestra zona de confort. Ahora que tengo hijos me cuesta todavía más, así que me encantaría que explicaras cómo están llevando el cambio tus niños. Muchas gracias por compartirlo.

Responder

Próxima entrega coles y adaptación 😉

Responder

Enhorabuena! Me parece muy valiente vuestra decisión. En mi caso por el trabajo de mi marido hemos cambiado tres veces de ciudad, pero antes de tener niños. Ahora tengo ganas de nuevo de hacerlo,las niñas son un poquito más mayorcitas (4 y 7) ,pero en mi caso es más fácil porque el trabajo no es un obstáculo por lo menos por parte de él.
Gracias por compartir la experiencia, el tema de coles sí que .e ayudaría,jeje
Un saludo

Responder

Próxima entrega colegios y adaptación desde mi punto de vista si se tiene la supervivencia asegurada ¿qué problema puede haber? Elegir bien el lugar y nada mas no? 😉

Responder

Yo vivo en Asturias y estoy deseando dejar este gris. Pero cuando fui mamá me llene de miedos y ahora se me hace un mundo. Me encanto tu post!!

Responder

Pues poco a poco hay que ir quitándoselos 🙂

Responder

Me parece muy interesante que nos sigas contando
Un saludo

Responder

Próximo capítulo colegio y adaptación 😉

Responder

A mi me sucede al revés que a ti. Me encantaría vivir en el norte, tanto norte de España como norte de Europa.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Required fields are marked *